martes, 28 de agosto de 2007

Fallece Antonio Puerta





El jugador del Sevilla, Antonio Puerta, ha muerto a los 22 años de edad. Puerta, que se desplomó en el césped del Sánchez Pizjuán mientras disputaba el encuentro contra el Getafe, luchaba desde el sábado por su vida en al UCI del Hospital Virgen del Rocío de Sevilla. El futbolista ha fallecido a las 14.30, según han indicado los médicos. Durante los últimos días, el jugador sufrió múltiples paradas cardiacas que le ocasionaron daños cerebrales irreversibles y, por último, el fallo de sus órganos vitales.



De todos los que hacemos 11 metros, nuestro más sentido pésame.

Descanse en paz.

lunes, 20 de agosto de 2007

El Sevilla F.C. se doctora

Con este ya habitual trofeo que enfrenta al Campéon de Liga con el Campeón de Copa con el que desde hace ya 25 años se inaugura la temporada futbolística de cada año, el Sevilla firmó un trofeo más (y van 5) y su primera Supercopa, en esta triunfal racha.


El Sevilla se consagró como 'SuperCampeón' de España en el mismo escenario en el que, hace sólo dos meses, se proclamaba Campeón de Copa tras 59 años, con un fútbol espectacular. Tras el corto resultado de ida (1-0, gol de Kanouté de penalty), el partido, que se presentaba como una oportunidad única para que Schuster presentase ante la parroquia blanca el cambio de aires del equipo madridista, a la postre resultó ser una exhibición de control y pegada sevillista, a la par que un severo correctivo al tembloroso proyecto merengue.

La cosa se complicó pronto para el conjunto madridista. Corría el minuto 16 cuando, en un balón botado por Duda, envenenado, provocó un errático rechace de Casillas que un enorme Poulsen acertaba a colocar en las botas de Renato, bigoleador esta noche, para que empujase el primer tanto visitante.
Aunque en ese mismo momento se sellaba el campeón del trofeo, quedaba partido para rato. Drenthe, sólo 7 minutos después, en un espectacular disparo desde casi 25 metros que se estrellaba en el larguero y botaba violentamente más allá de la línea, ponía las tablas en el marcador.

Poco le duraría la alegría al Madrid, que durante unos minutos apretó arriba intentando estrechar distancias en el marcador global. Sólo 5 minutos después de la igualada, una internada por la banda con idénticos protagonistas que en el primer tanto, Duda al centro y Renato al remate, y el trofeo ya muy lejos de la capital. No acabaron ahí los desajustes defensivos madridistas, pues, tras un córner visitante, Pepe, el 'central de los 30', en un despiste de marcaje no tuvo más remedio que meter la mano para evitar el remate de Kanouté. No perdonó ni el árbitro, muy atento, ni el de Malí, que transformó, poniendo la remontada lejos hasta en el imaginario de los más soñadores. Y cuando todo parecía llevar a los protagonistas a vestuarios, un centro al segundo palo de Sneijder y un remate inverosímil de Cannavaro, dejaba partido por decidir, aunque no campeón.


Tras el descanso, Schuster concedía a Guti, eterno reivindicado, en un sistema que se antojaba un poco más natural para el ideal de juego que se pretendía con la incorporación del técnico madridista. Juande, por contra, apuntalaba el centro del campo con Keita y retrasando a Poulsen, pensando en romper por la medular el intento de acometida de madridista. No le salió mal el cambio a Juande. Si bien el Madrid se hizo con el control del juego, nunca dió la sensación de poder firmar una espectacular remontada como las que brindaba el curso anterior. Palop fue suficiente para, en un par de ocasiones (una especialmente espectacular a testarazo de Raúl) desbaratar el sueño madridista.

Fue Ramos, en el 78, el que pareció firmar el tanto de la paz. Un empate a un Madrid que lo intentó, digno, pero espectacularmente frágil de medular hacia atrás, y un trofeo inédito para el Sevilla.
No estaba por la labor el de Mali. En un desafortunado cruce de Pepe (nefasto toda la noche) con Casillas, Kanouté cazaba el segundo en su cuenta, y el cuarto en el marcador.
Sólo algunos minutos después, Pepe era expulsado y Kanouté aprovechaba el ahora enorme agujero defensivo madridista para firmar un hat-trick en el Bernabeu, que no es moco de pavo.

El Sevilla, tras un meneo considerable al Campeón de Liga, demostró dos cosas: la primera, que el Madrid llega muy verde al inicio de la competición, y que va a sufrir muchísimo a campo abierto. La segunda, que quien crea que la época dorada del Sevilla ya toca a su fin con el reto de la Champions mejor que se lo piense dos veces. Porque el Sevilla ya es un grande. Porque el Sevilla, se ha doctorado.